CEOE Castilla y León exige para el nuevo año que se adopten medidas “extraordinarias y urgentes” para proteger al tejido empresarial de la Comunidad y considera prioritaria una reducción de las cargas fiscales. Asimismo, insiste en que en Castilla y León, la presión de la inspección fiscal es mayor que en otros territorios lo que constituye un factor clave para la inversión empresarial y les hace estar en desventaja.
CEOE Castilla y León vive la actual situación económica con mucha expectación, inquietud y preocupación; porque en el contexto actual planean incertidumbres que no invitan al positivismo. Nuestra Comunidad, aunque creció un 3,1% en el tercer trimestre del año, ha sufrido un deterioro en el crecimiento y la previsión es que siga mermando el dinamismo durante los próximos meses. Los datos del desempleo tampoco son nada halagüeños. Además, si comparamos los datos del IPC de Castilla y León con otras comunidades, nos situamos como la segunda autonomía con la tasa interanual más alta del país, con un 7,8% tan solo por detrás de Castilla-La Mancha (8,1%). En el caso del Índice de Producción Industrial de Castilla y León, tenemos el quinto peor registro del conjunto autonómico, con una caída del 0,4% en el mes de septiembre, y respecto a las exportaciones, según el último informe mensual de Comercio Exterior (Comex) publicado por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, la Comunidad Autónoma es la única que descendió su volumen de ventas al exterior de enero a septiembre.
Se ha generado un clima empresarial que está limitando las inversiones y las proyecciones empresariales cuando lo que impera es la incertidumbre. A la vez, no cesan de crecer los precios energéticos ya muy encarecidos, y la cadena de suministro de determinados materias y bienes continúa presentando cortes en determinadas industrias, situación que conlleva un efecto dominó al resto de actividades productivas.
Llegados a este punto, en el que, además, el potencial empresarial se deteriora, con un saldo de fuga de empresas negativo; tanto, que se coloca como el tercero peor del país solo por detrás de Cataluña y Navarra, según los datos que ofrecen los Registradores de España, en CEOE Castilla y León creemos que no sólo debemos tomar medidas para revertir esta situación sino, también, para promover cambios de fondo que permitan superar las debilidades.
CEOE Castilla y León apuesta, por tanto, por tomar medidas para revertir esta situación y también por promover cambios de fondo que permitan superar las debilidades. La solución debe ser práctica, y pasa, por generar más riqueza, por industrializar, por una apuesta decidida y efectiva por la innovación, la digitalización, la inversión en tecnología, la retención y atracción del talento, la internacionalización y por aumentar el tamaño de nuestras empresas para que podamos ganar competitividad.
La patronal autonómica apela a reforzar la apuesta por la educación y la formación, con modelos que tengan como horizonte la empleabilidad; y apuesta por una reindustrialización con un alto componente de innovación.
CEOE incide en seguir avanzando en la unidad de mercado porque todavía queda mucho trabajo por hacer y además exige perseguir con mayor contundencia la economía sumergida y la competencia desleal. Lógicamente, todo ello nutrido de una fluida inyección de liquidez.
Igualmente, CEOE destaca la importancia de la colaboración público privada a la hora de encarar esta nueva etapa, aunque aún nos encontramos con serias trabas al despliegue de esta colaboración, donde la normativa en numerosas ocasiones encorseta las posibilidades no solo de alcanzar mayores acuerdos de cooperación público privada; sino también mayores mejoras en términos de eficiencia. Se necesita, por tanto, seguridad jurídica, estabilidad regulatoria y calidad en la norma.
CEOE Castilla y León y sus organizaciones miembro seguiremos trabajando para impulsar este proceso de transformación de nuestra economía, en el marco del diálogo social y apoyando a nuestros empresarios en lo que mejor saben hacer: emprender, generar crecimiento económico y crear empleo.