La Confederación de Organizaciones Empresariales de Castilla y León considera que los datos de la EPA del tercer trimestre confirman el avance en el proceso de recuperación de la actividad empresarial que viene produciéndose en los últimos meses, paralelamente al progresivo levantamiento de las restricciones por la pandemia y al descenso de la incidencia.  

Así, el número de parados en Castilla y León disminuyó un 19,84% (27.600 desempleados menos), en relación al trimestre anterior, situándose el número total de desempleados en 111.400, y fijando la tasa de paro en el 10,05%, frente al 14,57% nacional. La evolución del paro, en comparación con el mismo trimestre del año anterior, muestra también una disminución, en este caso, del 19,95% (27.100 desempleados menos).

Las cifras registradas ponen de relevancia, por tanto, el compromiso y gran esfuerzo que están realizando las empresas para recuperar la economía y, con ella, el mercado laboral.

Para CEOE Castilla y León, es urgente que, una vez superadas las restricciones motivadas por la pandemia, se trabaje sin más dilación en la creación de un marco social, económico y laboral que procure a la Comunidad un modelo que garantice bienestar, seguridad y estabilidad.

En su opinión, los empresarios necesitan que se huya de todos los elementos de incertidumbre, rigidez e incremento de costes que pueden lastrar las decisiones empresariales y de inversión, y los esfuerzos se dirijan a consolidar medidas de fomento de la actividad empresarial, la sostenibilidad,  la economía circular, la conectividad y digitalización, pues las empresas son las protagonistas de la creación de empleo estable  y consolidado.

En contra de los citados objetivos se encuentra el proyecto de los Presupuestos Generales del Estado para el año 2022 que, según CEOE Castilla y León, no van orientados a disminuir el déficit público extraordinario que padecemos sino que, por el contrario, consolidan medidas de incremento del gasto público sostenido con un incremento de la presión fiscal que desconoce la realidad de la economía. La consecuencia que podemos prever de estos presupuestos, de ser aprobados, será más endeudamiento, más déficit, y menor inversión y, con ella, menos puestos de trabajo.

Por otra parte, CEOE Castilla y León insiste en la importancia de que la recepción de los fondos europeos se canalice cuanto antes, para todas las empresas, pymes, micropymes y autónomos. De forma paralela, se ha de infiltrar mayores dosis de eficacia y eficiencia en la gestión pública para impulsar y facilitar el aterrizaje en la economía real de dichos fondos.  Así, la colaboración público-privada se hace ahora más necesaria que nunca si se quiere lograr un nivel de ejecución alto de estos fondos.