Una vez conocidas las cifras del paro de enero, publicadas por el Ministerio de Trabajo y Economía Social, CEOE Castilla y León sigue constatando el negativo impacto de la pandemia del COVID-19 en la evolución del mercado de trabajo en la Región, cuyos datos arrojan que el desempleo subió un 3,08% (5.197 personas más) el pasado mes, situándose la cifra total en los 173.093 parados, mientras en tasa interanual, el crecimiento fue del 20,85% (29.998).
Por su parte, la afiliación a la Seguridad Social en Castilla y León descendió en 12.058 personas en enero con respecto al mes anterior, un 1,33%, situándose la cifra total de afiliados en la Comunidad en 895.910.
CEOE Castilla y León quiere hacer hincapié en el especial impacto que el desempleo está teniendo en sectores tan importantes para la economía de la Comunidad, como el sector servicios. Así, de los 5.197 nuevos parados, 4.358 personas corresponden a un sector con el tejido empresarial agotado.
A la vista de la cifras conocidas, los empresarios de Castilla y León apuestan por apoyar definitivamente y con urgencia a los sectores más duramente castigados por las restricciones de actividad y movilidad; apoyo que no solamente pasa por establecer un marco normativo adecuado sino por ayudas directas y beneficios fiscales que garanticen la competitividad y continuidad de las empresas.
De no adoptarse las citadas medidas, CEOE Castilla y León advierte de que nos enfrentaremos, sin duda, a una perpetuación de la actual situación de crisis en el mercado laboral de impredecibles y desconocidas consecuencias para la economía.
Por ello, la Confederación reclama a las administraciones públicas que tomen conciencia de la situación actual y que sean ágiles y determinantes a la hora de adoptar las mencionadas medidas.